La posada Bonns Ventos es una apuesta segura si estás pensando en visitar Ilhabela, uno de los destinos turísticos más buscados en el estado de São Paulo. Se encuentra frente a la playa de Perequê y muy cerca de la balsa que tendrás que usar para llegar a este idílico lugar.
Es muy tranquila, tiene una decoración ideal que te hace sentir relajado y las habitaciones son amplias, cómodas y silenciosas. La piscina está frente al mar. Si tienes la suerte de que haya poca gente en la posada podrás disfrutar de toda una mañana de paz tomando el sol, haciendo fotos y descansando en un escenario de película.
La playa de Perequê es una de las más urbanas. Encontrarás kioskos, bares, restaurantes y empresas de turismo en las que podrás contratar algunas actividades como un paseo en jeep hasta la playa de Castelhanos, deportes acuáticos como paddle surf o submarinismo.
La posada Bonns Ventos está muy bien situada para quien no quiere perder el tiempo en adentrarse por los caminos de la isla.
Una de las cosas que más me llamó la atención pero que no disfruté nada porque fui sola es la sala de juegos y actividades. Está decorada con fotografías y símbolos de la música y en medio hay un billar y una mesa grande. Cuando me iba entraron un par de familias con niños. Imaginé que se lo pasarían bomba allí. No puede ser de otra manera.
Una cosa que me encanta es que en las habitaciones haya red, hamaca de tela. Si tienes tiempo, entre actividad y actividad, descansar en allí es uno de los mayores placeres del mundo. También me atraparon las camas que tienen en el jardín. ¡Son geniales! Rodeadas con sus cortinas… es un espacio precioso.
El desayuno buffet es bastante variado, casero y de buena calidad. Se sirve en la parte de abajo, junto a la recepción, en un entorno natural.
En cuanto al entorno, lo que hay alrededor son casas, restaurantes y tiendas. Ilhabela es una isla sin ningún riesgo, con una gran seguridad, donde no se producen prácticamente casos de violencia o robos. Además, al ser un barrio residencial, si tienes que llegar por la noche, no pasarás ningún miedo. En absoluto.
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