Maria Fumaça es el nombre popular de una línea de tren histórica en Brasil. Y es que en el siglo XIX este medio de transporte, ahora decadente, fue muy popular sobre todo para la carga de mercancías. No solo recorría los bellos montes de Minas Gerais sino también otros estados como São Paulo, Rio Grande do Sul y Santa Catarina.
Los vagones fueron restaurados y los trenes convertidos en una atracción turística. Pasan por varias zonas y unen, por ejemplo, algunas de las ‘cidades históricas’ de Minas Gerais. Yo hice el trayecto São João del Rei–Tiradentes.
En la estación de origen (¡qué preciosa ciudad!) hay un museo con las piezas más antiguas y fotos que explican el origen del tren turístico Maria Fumaça.

Esta línea en concreto fue inaugurada en el año 1881 por Don Pedro II y tiene 12 kilómetros. El camino es maravilloso: verdes montañas de fondo, ríos, grutas y construcciones de la época que todavía se conservan. Es como entrar en un túnel del tiempo y retroceder al pasado.

Después de disfrutar del paseo, cuando el tren llega a la estación de Tiradentes (ciudad que tienes que conocer sí o sí si eres un verdadero ‘apaixonado’ de Brasil) hay una especie de demostración para que la gente vea cómo funciona y cómo se pone en marcha. La locomotora empieza a dar vueltas entre la gente, encantada de haber decidido formar parte de esta experiencia.
El Maria Fumaça no funciona todos los días. En cualquiera de los estados en los que está presente, lo ideal es buscar información sobre los recorridos y los días en los que circula.
Así podrás organizar mejor el viaje y las actividades que te interesa hacer en tu viaje a Brasil. Consulta el precio, los horarios y las rutas del tren turístico y, si tienes la oportunidad, no la pierdas porque realmente merece la pena.
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